NOS ESTÁN MINTIENDO
La televisión nos mostró imágenes de personas muy felices que vivían contentos y llenos de oportunidades. A eso le llamamos dentro de nuestra cultura el “Sueño Americano”, pero técnicamente se llama el MODELO DE DESARROLLO.
¿MODELO DE DESARROLLO DE QUÉ?
Como su nombre lo indica es un modelo que el primer mundo nos planteó a todos para que logremos una “verdadera democracia”. Es decir, que todos podamos comprar y comprar para satisfacer nuestras necesidades que, como te has percatado, han crecido mucho. Está bien que todos tengamos acceso a un plato de comida, ¿pero debemos tener todos “derecho” de comprar un televisor de plasma? Ves, se INVENTARON necesidades para que nosotros consumamos y consumamos.
¿QUE PASARÍA SI TODOS COMPRAMOS COMO ELLOS?
Se cree que si todos consumimos como lo hacen las grandes potencias, necesitaríamos 5.7 planetas Tierra más (y solo tenemos UNO). Por eso es que el modelo de desarrollo es RIDÍCULO y asesino. Para que se pueda saciar el hambre de consumo de las grandes potencias, ellos han tendio que sembrar y sembrar y sembrar y sembrar. Hasta que finalmente se encontraron con que NO DEBÍAN tocar sus bosques. Así lo hicieron. NO TOCARON sus bosques porque sabían la importancia que tenían, sino que sembraron al otro lado de sus fronteras. ¡QUE BUENA IDEA!
¿CUIDEMOS LOS RECURSOS?: ¿USTED O YO?
Estas son las cifras de los países qué más contaminan y en porcentaje de contaminación. Ríase conmigo porque son ellos quienes nos dicen A NOSOTROS que debemos cuidar nuestros recursos y son ellos los que nos mandan sus técnicos para que nosotros, SALVAJES, podamos entender la importancia de la naturaleza.
PAIS TONELADA DE CO2 %
EEUU 2530 33.55
CHINA 2430 32.22
RUSIA 600 7.96
INDIA 529 7.01
JAPON 363 4.81
ALEMANIA 323 4.28
AUSTRALIA 205 2.72
SUDAFRICA 201 2.67
REINO UNIDO 192 2.55
COREA DEL SUR 168 2.23
PERO, ¿QUÉ NOS PASÓ?
La población de occidente se comió la mentira de los “derechos”. Decimos entonces: “Yo tengo derecho a tener un carro, ME LO MEREZCO”; “Yo tengo derecho a comprar un nuevo juego de sala. MI FAMILIA SE LO MERECE”; “Yo tengo derecho a comer la comida chatarra que me gusta. ME LO MEREZCO”, etc. Pero como ves, esta es solo una parte de la oración porque lo correcto debería ser: “Yo tengo derecho a comprar un auto, pero si lo hago contribuiré con la contaminación global, y la humanidad TIENE DERECHO a vivir. Es decir, mi derecho a tener un auto no es mayor al derecho de los demás de VIVIR.”
¿A ALGUIEN LE IMPORTA ESTE PROBLEMA?.
En 1997, más de 160 países firmaron el Protocolo de Kyoto por el que se comprometieron a reducir la emisión de 6 gases que incrementan el efecto invernadero. Los países de la Unión Europea se adhirieron en el 2002. Rusia lo hizo en el 2005, pero el gobierno de Estados Unidos, se niega a ratificar el protocolo.
¿QUÉ PODEMOS HACER?
a) No creer la mentira de que SOMOS LO QUE TENEMOS. Somos lo que somos: nuestros sueños, nuestra familia, nuestros amigos, nuestra educación.
b) No creernos la mentira de que SOMOS POBRES. Ellos, las primeras potencias, son los pobres. Nosotros solo no tenemos plata pero somos inmensamente ricos: tenemos familias formadas ELLOS NO; nuestra vida gira en torno al grupo donde somos solidarios ELLOS NO; nosotros tenemos posiblemente las últimas fuentes de agua ELLOS NO; nosotros tenemos los recursos naturales de donde proviene la medicina ELLOS NO.
c) Dejar de comprar lo que no necesitamos. La codicia es el problema. Creemos que debemos comprar todo lo que aparece: celulares de moda, plasmas, auto nuevo cada año, ropa de sobra, comida llena de grasa, casas para vacaciones, reproductores de música que nos aíslan de nuestras familias, etc.
d) Reciclar los plásticos, el cartón y el vidrio.
e) Tener huertos orgánicos en nuestras casas para no tener que consumir el veneno que nos venden los agricultores que cultivan con pesticidas y venenos.
f) PERO LO MÁS IMPORTANTE es no dejar de ser solidarios. Nosotros no somos la imagen de las series de televisión de los países del primer mundo. Somos gente que se da la mano. Comparte con el vecino, pero primero, toca su puerta y conócele.
Ya no hay otra oportunidad. O empezamos a ser solidarios o se acaba la especie.
